El dengue es una enfermedad viral que afecta a millones de personas en todo el mundo cada año, particularmente en regiones tropicales y subtropicales. Transmitida principalmente por el mosquito Aedes aegypti, esta enfermedad puede variar desde una fiebre leve hasta formas graves que pueden ser mortales. A continuación, se detallan los síntomas del dengue, cómo se transmite, las estrategias de prevención más efectivas y las acciones a seguir ante la aparición de síntomas de alarma. Esta información es crucial para reducir la incidencia y la gravedad del dengue, protegiendo así la salud pública.
Síntomas del Dengue
El dengue se manifiesta inicialmente con síntomas similares a los de la gripe, que incluyen:
- Fiebre alta repentina
- Dolor de cabeza intenso
- Dolor detrás de los ojos
- Dolor muscular y articular
- Náuseas y vómitos
- Fatiga
- Erupción cutánea, que puede aparecer unos días después de la fiebre
En algunos casos, la enfermedad puede evolucionar hacia formas más graves, conocidas como dengue grave o dengue hemorrágico, que presentan síntomas adicionales como:
- Dolor abdominal intenso y continuo
- Vómitos persistentes
- Sangrado de encías o nariz
- Vómitos con sangre o sangre en las heces
- Dificultad para respirar
- Fatiga extrema e irritabilidad
Transmisión del Dengue
El dengue se transmite a través de la picadura de mosquitos hembra infectados del género Aedes, principalmente Aedes aegypti y, en menor medida, Aedes albopictus. Estos mosquitos son más activos durante el día, especialmente en las primeras horas de la mañana y antes del atardecer.
El virus no se transmite de persona a persona de manera directa, sino a través de la picadura del mosquito infectado. Sin embargo, una persona infectada puede transmitir el virus a los mosquitos no infectados durante el periodo de viremia (cuando el virus está presente en el torrente sanguíneo).
Prevención del Dengue
La prevención del dengue se centra en evitar la picadura de mosquitos y en el control de la población de mosquitos. Las principales medidas preventivas incluyen:
- Eliminación de Criaderos: Deshacerse de lugares donde los mosquitos puedan reproducirse, como recipientes con agua estancada (macetas, neumáticos viejos, botellas, etc.).
- Protección Personal:
- Uso de repelentes de insectos aprobados.
- Vestir ropa de manga larga y pantalones largos, especialmente en áreas donde el dengue es endémico.
- Usar mosquiteros en las camas y asegurar que las ventanas y puertas tengan mallas.
- Medidas Comunitarias:
- Fumigación en áreas afectadas para reducir la población de mosquitos adultos.
- Educación comunitaria sobre la importancia de eliminar criaderos de mosquitos y protección personal.
Actuación ante síntomas de alarma
Si se presentan síntomas de dengue, es fundamental buscar atención médica inmediata. La detección temprana y el tratamiento adecuado son cruciales para prevenir complicaciones graves. Ante la aparición de síntomas de alarma, como dolor abdominal severo, vómitos persistentes, sangrado, dificultad para respirar o cambios en el estado mental, es urgente acudir a un centro de salud.
El tratamiento del dengue es principalmente de soporte, incluyendo:
- Hidratación: Mantener una adecuada ingesta de líquidos para prevenir la deshidratación.
- Control de la Fiebre y el Dolor: Utilizar paracetamol para aliviar la fiebre y el dolor. Evitar el uso de aspirina y otros antiinflamatorios no esteroides (AINEs) debido al riesgo de hemorragia.
- Monitoreo Médico: Supervisión constante por parte de profesionales de la salud, especialmente en casos de dengue grave.
La prevención y el control del dengue requieren un esfuerzo conjunto entre la comunidad y las autoridades de salud. La eliminación de criaderos de mosquitos y la protección personal son fundamentales para reducir la incidencia de esta enfermedad. Ante cualquier síntoma, es crucial buscar atención médica para un diagnóstico y tratamiento oportuno.